Las rosquillas de San Isidro son más que un simple dulce; son una tradición que se extiende a lo largo y ancho de la ciudad de Madrid, celebrando al patrón de la ciudad cada mes de mayo.
Hoy, desde La Mallorquina, queremos que descubras qué son las rosquillas de San Isidro, las diferencias que existen entre las rosquillas tontas y listas y los tipos de rosquillas que puedes disfrutar en honor al santo de la capital española.
¿Qué son las rosquillas tontas?
Las rosquillas tontas son las más sencillas de hacer. Su preparación consiste en una masa simple, que tras ser frita, se espolvorea con azúcar. Sin coberturas adicionales, su encanto radica en la sencillez de sus ingredientes, de ahí su nombre y en la textura perfecta que logran, crujiente por fuera y suave por dentro, capturando la esencia de la repostería tradicional madrileña.
¿Qué son las rosquillas listas?
Y en el lado contrario tenemos a las rosquillas listas, que se presentan con una elegante capa de glaseado, tradicionalmente de limón o anís, que les otorga un acabado brillante y un extra de sabor.
Parten con los mismos ingredientes que las tontas, pero este toque final de glaseado no solo las distingue visualmente de las tontas, sino que también añade un sabor más dulce y jugoso, convirtiéndolas en una opción favorita para quienes buscan un dulce más elaborado.
¿Cuáles son las diferencias entre las rosquillas tontas y listas?
La diferencia fundamental entre las rosquillas tontas y listas está en su acabado. Mientras que las tontas se mantienen en su forma más básica con ingredientes sencillos como la harina, huevos, azúcar, aceite y anís, las listas se embellecen con un glaseado aromatizado.
¿Qué tipos de rosquillas de San Isidro existen?
Madrid se engalana cada mayo con sus tradicionales rosquillas de San Isidro, ofreciendo una variedad que satisface todos los gustos. Desde la sencillez de las tontas hasta la complejidad de las listas, como has podido ver, cada tipo cuenta una historia, invitándonos a degustar la riqueza de la repostería madrileña. Veamos ahora las variedades de rosquillas que podemos probar en estas fiestas.
Rosquillas tontas
Las rosquillas tontas de San Isidro son la variedad más tradicional y se caracterizan por su sencillez en ingredientes, pero no por ello menos deliciosas. La masa, después de frita, se espolvorea con azúcar, resultando en una textura perfectamente equilibrada: crujiente por fuera y tierna por dentro.
Rosquillas listas
Las listas, por su parte, son la versión más decorada de este dulce. Su cobertura de glaseado, ya sea de limón, anís o incluso chocolate, no solo las hace visualmente atractivas, sino que añade una capa extra de sabor.
Rosquillas de Santa Clara
Están bien diferenciadas por su cobertura de merengue blanco y seco, las rosquillas de Santa Clara son una delicia suave y ligeramente dulce. Este tipo de rosquilla combina la textura aireada del merengue con la riqueza de la masa frita.
En La Mallorquina, nos enorgullece ser parte de la tradición de San Isidro, ofreciendo rosquillas que son las verdaderas protagonistas. Te invitamos a descubrir nuestras diferentes rosquillas de San Isidro en nuestra pastelería.